"Un bien arbitrario es tan imposible como un mal arbitrario. La verdadera libertad está en consonancia con una santa necesidad que sentimos en el conocimiento esencial cuando espíritu y corazón, atados por su propia ley, afirman libremente lo que es necesario. Si el mal consiste en una discordia de ambos principios, el bien sólo puede consistir en el perfecto acuerdo de los mismos" estructura del coloquio (pinche sobre los nombres para ir al texto): Comentario de Alejandro Rojas, con réplica de Gabriel Carpintero y contraréplica de Anlejandro Rojas. Réplica de Rafel Reyna y contraréplica de Alejandro Rojas. cierre